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Sep
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Tenía que suceder. Era cuestión de tiempo.
Hace ya un tiempo que hice mi primera incursión en el mundo Apple cuando, hace ya más de dos años, adquirí un iMac de 20″ con el que a día de hoy sigo muy contento. Algo más tarde, en verano de 2008, me hice con un iPod 3G de 8GB (sí, el modelo chaparrete). Un gadget que, aunque en un principio consideré tenía un precio excesivo, lo cierto es que sigue funcionando igual de bien; cero problemas.
Pero la manzana es poderosa y tienta a la humanidad. Si a eso le sumamos lo harto que estoy del Windows Vista con el que contaba mi portátil, y tras sopesar el gasto y el uso que quiero darle al portátil, me decidí finalmente a dejarme seducir de nuevo por el poder de la manzana.
En efecto, desde el pasado jueves son el feliz propietario de un Macbook Pro de 13,3″. Y es que entre Windows Vista y Mac OSX Leopard hay, al menos para mi, una diferencia abismal en lo que a fluidez, usabilidad y eficiencia se refiere (aunque muchas distribuciones Linux cumplirían también estas aseveraciones). No os voy a pegar el rollo intentando «evangelizar» a nadie para que se pase a Mac, más que nada porque cada uno puede usar lo que más le convenga, pero es cierto que Mac simplemente funciona. Y eso más de lo que Windows Vista me daba hasta ahora.
Aprovechando el evento que tenía lugar un día después, el viernes 28 de agosto, y su precio tan irresistible me acerqué a un Corte Inglés y también adquirí una copia de la nueva versión del sistema operativo de Apple, Mac OSX Snow Leopard:
Aún no lo he exprimido en condiciones, lo instalé todo ayer por la tarde, pero parece que Snow Leopard funciona aún mejor que la versión anterior, Leopard. Parece ir más fluido, hay cosas que son más cómodas y visualmente es todavía más agradable. En definitiva, que por fin me he desvinculado de windows, al menos de forma particular ya que en el trabajo es lo que se utiliza, y que estoy muy contento con mi nueva adquisición. Debería haberla hecho antes.
¡Leopard rugiendo a toda máquina!
septiembre 1st, 2009 at 21:44
Ains Manuel…si me hicieras caso de vez en cuando disfrutarÃas antes de nuestra manzanita. Alma de cántaro! Disfrutalo que es un pepinazo de portátil.
septiembre 1st, 2009 at 22:40
Jejeje Pues sÃ, ya lo tengo por fin.
He tardado pero bueno, como dice el refrán, «No hay mal que por bien no venga». Si me lo hubiese comprado el año pasado serÃa un modelo de policarbonato, y me gusta mucho más este de aluminio (que además tiene una baterÃa mucho mejor, se calienta menos y es más ecológico).
Buah, estoy como un niño con zapatos nuevos. Ahora me toca sacarle todo el provecho posible.